El Ayuntamiento de Barcelona a iniciativa de la Estrategia compartida de Salud Sexual y Reproductiva (ESSIR) de la ciudad de Barcelona ha publicado la Guía por una formación básica en salud sexual y reproductiva-Derechos sexuales y cuidados: reflexiones feministas para intervenciones comunitarias, una herramienta que nos tiene que ayudar a impulsar un modelo de promoción de la salud sexual desde un enfoque de derechos y centrado en el bienestar de la persona.
Los contenidos de la guía han sido elaborados por el equipo de profesionales de las entidades Creación Positiva y Sida Studi. El documento persigue la finalidad de compartir elementos y un marco común que faciliten las intervenciones para la promoción de la salud sexual y forma parte de un proceso formativo. A su vez, incorpora la experiencia aplicada de la formación de agentes comunitarias del Distrito de Ciutat Vella, y es el fruto del trabajo conjunto con diversos agentes. Éstos son: l’Agencia de Salud Pública de Barcelona, Plan de Barrios del Raval Sur y el Gòtic Sur, Instituto Catalán de la Salud (Dirección de Atención Primaria y Comunitaria) y Ayuntamiento de Barcelona (Departamento de Salud, Dirección de Servicios a las Personas y al Territorio de Ciutat Vella, Programa BCN Interculturalidad, Instituto Municipal de Personas con Discapacidad, Departamento de Promoción de la Infancia, Departamento de Promoción de las Personas Mayores, Consejo Asesor de las Personas Mayores, Departamento de Juventud y 4ª Tenencia de Alcaldía de Derechos Sociales, Justicia Global, Feminismes y LGTBI).
Con esta guía, aparte de aportar conceptos teóricos y claves técnicas, se pretenden generar procesos de reflexividad entre las agentes comunitarias, aportar conocimientos y dar herramientas desde el ámbito comunitario para impulsar este modelo.
Es una mirada innovadora que busca potenciar cambios en la mirada de las agentes comunitarias para impulsar un modelo transformador de promoción de la salud sexual que sitúe la diversidad de las personas como una cuestión central y el placer, el bienestar, la autonomía, los cuidados y el empoderament comunitario como partes consustanciales de la salud sexual.