Cada fin de semana, cuando Obrim Carrers, toda la calzada está reservada para peatones. Las bicicletas y patinetes pueden circular con la velocidad limitada a 10 km/h y respetando siempre la prioridad del peatón (que comporta desmontar del vehículo si hay una aglomeración de personas a pie).
Con la misma limitación de velocidad, se permite el paso de los servicios esenciales, de emergencias y de personas con movilidad reducida, y el acceso de todos los vehículos a los aparcamientos públicos y privados. Toda la circulación transversal está permitida por los siguientes cruces delimitados:
- Consell de Cent hacia Moianès.
- Olzinelles hacia pº San Antonio y Galileu.
- Rambla de Badal, en ambos sentidos.
- Sugranyes hacia en Portbou.
Pero el tráfico de bajada de la rambla del Brasil se desvía en la avda. Madrid; el de Joan Güell, en la calle de Blanco; el tráfico residual de las calles de Cáceres y Sant Jordi tiene que volver hacia Daoíz y Velarde; el de las calles de Muntadas, Watt, Salou y Autonomía sale hacia el pº San Antonio; y Príncipe Jordi y Béjar, hacia Consell de Cent. En la calle de Burgos también está cortado el tráfico hacia Riera de Tena.
El corte de tráfico afecta también al recorrido de diversas líneas de bus. El 52 no circula y el D20 se desvía por la avda. Madrid, pero las líneas H10 y V5 llegan hasta la plaza de Sants, donde dan la vuelta para salir de nuevo hacia el paseo de San Antonio. El H10 mantiene así su recorrido habitual de entre semana, mientras que el V5 que baja por la calle Joan Güell se desvía en la plaza de Sants hacia el paseo de San Antonio, la estación de Sants y las calles Tarragona y Consell de Cent.
Cada año, Obrim Carrers deja de funcionar en los meses de julio y agosto, cuando la afluencia de peatones también es menor. De septiembre a abril, el horario es de 9 a 20 h; los meses de mayo, junio y septiembre se aplica el horario de verano, que es de 10 a 21 h.
El eje de la calle de Sants y la Creu Coberta se incorporó al programa Obrim Calles en marzo de 2020. Después de la buena acogida de este corte de tráfico durante los fines de semana del desconfinamiento, desde octubre de aquel año se hace de forma regular cada sábado y cada domingo. Se han incorporado diversas mejoras pedidas por el vecindario, como la protección de los extremos con bloques de hormigón o el refuerzo de la señalización que limita la velocidad de bicicletas y patinetes. También se han concedido licencias a bares y restaurantes para que estos días instalen terrazas en la calzada. Tres de cada cuatro vecinos y vecinas, y nueve de cada diez comerciantes, están a favor de la pacificación de Sants – Creu Coberta los fines de semana.