Todos los sábados y domingos, de 9 a 20 horas, se reserva toda la calzada para los peatones en el eje Creu Coberta – calle de Sants, entre la plaza España y la calle Munné (av. Madrid). Durante las restricciones, se permite el paso de vehículos de servicios municipales, de emergencias y de personas con movilidad reducida, y el acceso a los aparcamientos. Se deja pasar toda la circulación transversal por los siguientes cruces:
- Consejo de Ciento hacia Moyanés.
- Olzinelles hacia pº San Antonio y Galileo.
- Rambla Badal, en ambos sentidos.
- Sugranyes hacia Portbou.
Pero el tráfico de bajada de la rambla Brasil se desvía en la av. Madrid; el Joan Güell, en la calle Blanco; el tráfico residual de las calles Cáceres y Sant Jordi tiene que volver hacia Daoíz y Verlarde; el de las calles Muntadas, Watt, Salou y Autonomía, sale hacia el pº Sant Antonio; y Príncipe Jorge y Béjar, hacia Consejo de Ciento.
El corte de tráfico afecta también el recorrido de cinco líneas de bus:
- Línea D20: en dirección a la plaza de España, se desvía por av. Madrid, las calles Berlín, Numancia y Tarragona; en dirección a la calle de Sants, se desvía por la calle Tarragona, pl. Países Catalanes, pº San Antonio, calle Condes de Bell-lloc y av. Madrid, con las correspondientes paradas alternativas.
- Línea 52: sin servicio.
- Línea H10: da la vuelta en la plaza de Joan Peiró.
- Línea V5: en dirección a Virgen de Port, se desvía por av. Madrid y las calles Berlín, Numancia, Tarragona y Consejo de Ciento.
El eje de la calle Sants y Creu Coberta se incorporó al programa «Obrim carrers» en marzo. Son dos kilómetros desde la plaza de España hasta la calle Munné, es decir, se trata de 39.900 m2 libres de la circulación de vehículos a motor, reservados para ir a pie o en bicicleta.
En toda la ciudad, el «Obrim carrers» se suma a otras iniciativas, como la pacificación de calles, las supermanzanas y el impulso de la movilidad sostenible, para conseguir una Barcelona más saludable, humana y segura. El programa, que durante una parte del estado de alarma se aplicó en siete grandes ámbitos de la ciudad, vuelve ahora adaptado a los tipos de vía y a su uso habitual, y atendiendo también las demandas vecinales.