Todas estas iniciativas, sobre todo las más reivindicadas por el vecindario también a través de los diversos espacios de participación, se van consolidando ahora con cambios definitivos en la regulación de los usos y los límites de velocidad en diversas calles.
Las calles de Sagunto y de los Juegos Florales (hasta los de Andalucía y de Gavá, respectivamente) ya se han señalizado como zona residencial con prioridad para todos los vecinos y vecinas que van a pie, y la velocidad de los vehículos limitada a 20 km/h. Es el mismo tipo de regulación que rige en todas las vías pacificadas de la ciudad, aunque hoy por hoy estas calles no se hayan reurbanizado como vías de plataforma única (sin desnivel entre calzada y aceras). Además, el tramo de más arriba de la calle de Sagunto, entre Burgos y Juegos Florales, que ya estaba cerrado al tráfico con pilones, también se cierra ahora al paso de peatones en las horas del recreo de la Escuela Cal Maiol, cuando la calle se utiliza como patio escolar.
La otra calle ya señalizada como zona residencial con prioridad para peatones, con la velocidad de los vehículos limitada a 10 km/h, es el de Violante de Hungría Reina de Aragón a lo largo de todo el barrio de Sants, desde la rambla del Brasil hasta la calle del Vallespir. Este eje era ya una vía “ciclable”, con la velocidad de los vehículos limitada a 30 km/h. Ahora se equipara a cualquier otro espacio de peatones de la ciudad.
Con respecto a todo el eje de las calles de Sants y Cruz Cubierta, donde el límite de velocidad ya se había rebajado a 30 km/h, ahora se ha instalado la señalización definitiva del corte de tráfico que se lleva a término todos los sábados y domingos. Esta señalización se extiende a todas las calles transversales o anexas que también se cierran con la ejecución del proyecto Abrimos Calles, lo que genera todos los fines de semana toda una gran zona pacificada de tráfico, con prioridad para peatones, a lo largo de los barrios de Sants-Badal, Sants y Hostafrancs.