Con una inversión de en torno a los tres millones de euros, esta transformación es una de las actuaciones prioritarias que se llevan a cabo en el marco del Plan de Barrios en Pueblo Seco. La propuesta es fruto de un proceso que ha contado también con la participación vecinal y de la comunidad educativa del entorno para definir un proyecto que facilite el uso cultural y deportivo, así como nuevos usos comunitarios, de este espacio del extremo sur del barrio.
La actuación contempla varios ámbitos: la creación de un parque urbano con diversidad de usos y nuevos juegos infantiles, el traslado del área para perros actual al parque del Mirador del Poble Sec y la creación de espacios deportivos y de ocio en las terrazas que conectan las Hortes y el Mirador. Se creará también un nuevo paso de peatones entre las aceras del paseo de Montjuïc, que mejorará las condiciones de accesibilidad y seguridad vial actuales. Después, el Poble-sec dispondrá de un gran parque urbano de más de 4.500 metros cuadrados.
La acción también integra el tramo de la calle de Carrera entre el paseo de Montjuïc y la calle de Vila i Vilà, que permitirá ampliar la superficie de los jardines. Así, la nueva propuesta rehace los dos espacios verdes, que hasta ahora estaban separados por la calle de Carrera, y los convierte en un solo parque. Eso permite ampliar y diversificar las áreas de juego infantil con distintos elementos para todos los públicos. El parque encaja dentro del plan “Barcelona da mucho juego”, que promueve la creación de espacios en los que los niños y niñas puedan desarrollar actividades de juego libre. Al mismo tiempo queda integrado en él un nuevo rebosadero del colector de Vila i Vilà.
Por otra parte, en las terrazas de acceso al parque del Mirador (733 metros cuadrados) se crean cuatro espacios con columpios, toboganes y troncos, así como elementos de calistenia de distintos tipos de barras conectadas, todos ellos unidos por una rampa y escaleras.
Con el traslado del área de estancia y paseo para perros al parque del Mirador del Poble-sec, se ampliará la zona de recreo para los animales, que pasa de los 500 metros cuadrados en la ubicación actual a tener más de 800. La nueva zona, mejor equipada, queda igualmente integrada dentro del proyecto y, al mismo tiempo, conectada con los espacios naturales de la montaña de Montjuïc.