Un atril en la Rambla en memoria de la primera manifestación del orgullo LGTBI
La primera movilización del orgullo LGTBI de todo el Estado español reunió en Barcelona a unas 5.000 personas el 26 de junio de 1977. La marcha comenzó en las Drassanes y fue subiendo por la Rambla hasta la Fuente de Canaletes. Ahora un atril de memoria recuerda este hecho histórico y rinde un homenaje a todas las personas que empezaron la lucha por los derechos del colectivo.
Desde el pasado sábado 29 de junio, un atril de memoria recordó esta histórica manifestación en la Rambla. El atril se descubrió en un acto que presidió el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni y que contó con varios representantes de entidades LGTBI de la ciudad, del teniente de alcaldía y concejal del distrito de Ciutat Vella, Albert Batlle, y el Comisionado de Políticas de Infancia, Adolescencia, Juventud y LGTBI, Javi Rodríguez.
Durante el acto también se hizo la entrega del reconocimiento a la trayectoria profesional otorgado por el Ministerio de Igualdad a Nazario Luque, considerado el padre del cómic underground español y uno de los pioneros en la representación artística de la homosexualidad, el sexo y el género en formato de viñetas.
La manifestación histórica de 1977
“¡Nosotros no tenemos miedo, nosotros somos”! La consigna se coreó con fuerza a lo largo de aquella manifestación histórica, que reivindicaba los derechos LGTBI y que ‘los grises’ acabaron disolviendo.
La manifestación había sido convocada por el Frente de Liberación Gay de Cataluña (FAGC), que en ese momento era ilegal. Encabezada por el colectivo trans, se añadieron a la comunidad homosexual miembros del movimiento feminista y vecinal, sindicatos y varios partidos políticos.
“Mi cuerpo es mío y hago con él lo que me da la gana”. “¡Amnistía sexual!” “¡No somos peligrosos!” Fueron otros lemas que pudieron leerse y oírse a lo largo de la manifestación.
Ya llegando a la plaza de Catalunya, la policía realizó varias cargas y disparó balas de goma. Al menos tres manifestantes resultaron heridos graves y un cuarto, Oriol Martí, fue golpeado, detenido y encarcelado durante 56 días en la Modelo.
Al día siguiente de la marcha, el FAGC publicó un comunicado valorando muy positivamente la movilización y denunciando la actuación de la fuerza pública para reprimir una manifestación que, hasta la aparición de la policía, había tenido un carácter pacífico.
Durante la Transición, la entidad obtuvo gran apoyo de organismos sindicales y partidos políticos. Con su lucha, logró, en 1979, la exclusión de los gays de la Ley de peligrosidad y rehabilitación social y la legalización de las organizaciones homosexuales en 1980.