La recogida de naranjas tuvo lugar el viernes 2 de febrero en el Monasterio de Pedralbes. Este año, fue el alumnado de la Escuela Paideia y la Escuela Jeroni de Moragas, y miembros del Centro Ocupacional Les Corts y el Taller Ocupacional Ariadna, el equipo encargado de completar esta primera fase del proyecto. En total, unos sesenta participantes.
Las naranjas recogidas, previamente analizadas por la Agencia de Salud Pública, serán procesadas y transformadas en mermelada en el obrador social es im-perfect®. Una mermelada bautizada con el nombre de “La Marga”, que será distribuida por entidades sociales de cada uno de los distritos a personas que sufren situaciones de pobreza alimentaria, riesgo de exclusión social, u otras situaciones de riesgo.
El proyecto
La ciudad de Barcelona dispone de más de 3.300 naranjos, que representan aproximadamente un 1,5% de los 202.000 árboles que albergan plazas, parques y calles de la ciudad. El distrito con más naranjos de naranja amarga es Sant Andreu, con un 35% del total de la ciudad, donde se inició este proyecto en 2021.
Desde el Ayuntamiento de Barcelona y con el impulso de Parques y Jardines, se desarrolla esta iniciativa en seis distritos de la ciudad con el objetivo de promover el aprovechamiento de los alimentos, con iniciativas de economía circular y verde que fomentan la participación ciudadana para avanzar hacia un modelo de ciudad más justo y sostenible.
Por otro lado, el proyecto también cuenta con acciones de sensibilización más allá de las espigadas. Desde Espigoladors se llevan a cabo una serie de talleres en centros educativos y entidades de los distritos para compartir con los niños, jóvenes y ciudadanía en general la problemática de las pérdidas y el desperdicio alimentario e intercambiar reflexiones en torno al derecho a una alimentación saludable y sostenible.
En la edición de 2023, el proyecto contó con la participación de más de 300 voluntarios y voluntarias en las espigadas y se recuperaron y transformaron un total de 2.671 kg de naranja amarga. 11.400 unidades de mermelada “La Marga” que fueron a parar a entidades sociales de la ciudad.