Los retratos de grupos de trabajadores y trabajadoras hechos en las fábricas e industrias a finales del siglo XX muestran el posado oficial de los obreros y obreras, unas imágenes en las que destaca una importante presencia del trabajo infantil.  En la colección de fotografías de la empresa metalúrgica La Maquinista Terrestre i Marítima se observa el personal en las salas de proyectos, el edificio de Sant Andreu o las locomotoras que fabricaban. Algunas de estas imágenes fueron publicadas en la revista que la empresa editó con motivo de la Exposición de 1929.

En el fondo de la fábrica de cintas Benet Campabadal, de Les Corts, se conservan fotografías y documentos del trabajo entre los años treinta y cincuenta, muchos de los cuales circularon en su momento como medio de promoción. En el caso de la fábrica textil Can Saladrigas, de Sant Martí, se ha conservado la factura pagada a Lucien Roisin, uno de los fotógrafos más importantes de la época y con tienda de postales en La Rambla, por el encargo de 23.000 postales, en 1913, que tuvieron una gran circulación y configuraron la imagen de la empresa.