Las obras de transformación empiezan este mes de junio y se alargarán, divididas en tres fases, durante diecisiete meses. El objetivo es convertir esta arteria en un gran eje verde, que priorice el vecindario, los peatones y el comercio de proximidad creando un gran corredor que vaya desde el parque de la Ciutadella hasta Collserola. Permitirá ampliar el espacio de las aceras, crear cuatro plazas nuevas y multiplicar por diez la superficie de parterres y zonas arbustivas, entre otras mejoras.
Enmarcadas en el plan Naturaleza 2030, que promueve el incremento y la conservación del espacio verde y la biodiversidad, estas obras cambiarán la distribución de espacios: si hasta ahora 20 de los 30 metros del ancho de la calle están destinados a la calzada, cuando se terminen, el 70 % de todo el espacio será para los peatones y el verde.
Así, la superficie de parterres y zonas arbustivas casi se multiplicará por diez, se incrementarán las zonas de estancia y los pasos de peatones y las aceras tendrán un mínimo de 5 metros de ancho y hasta un máximo de 12 en determinados puntos.
Al mismo tiempo, se crearán cuatro plazas, que ocuparán en conjunto más de 2.800 metros cuadrados y que se situarán en la plaza de Joanic y en los cruces de las calles de Sant Lluís y de Ca l’Alegre de Dalt, entre Encarnació y Pau Alsina, y de las calles de Sardenya y de la Providència.
En cuanto a la circulación, se reducirá el ancho de la calzada y se priorizará la circulación de vehículos locales, bicicletas y autobuses. De subida, habrá un carril para buses y tráfico local y un nuevo carril bici segregado, y de bajada, un carril compartido para buses, tráfico local y bicicletas. La velocidad estará limitada a 30 km/h.
La transformación incluye un carril de servicios en ambas aceras, que queda integrado entre parterres y permite situar zonas de carga y descarga, contenedores, aparcamientos de bicicletas y el resto de servicios de manera repartida a lo largo de toda la vía. El número de paradas de bus, que se reubicarán en el nuevo eje verde, se mantendrá.
El proyecto, trabajado conjuntamente mediante un proceso participativo con el vecindario, comerciantes y entidades, tiene un presupuesto de 13,6 millones de euros.
Obras en tres fases
Los trabajos de urbanización empiezan el 7 de junio y durarán 17 meses. Tendrán lugar en el tramo comprendido entre la plaza de Joanic y la ronda del Guinardó y permitirán armonizar la conexión entre barrios de los distritos de Gràcia y Horta-Guinardó: el Camp d’en Grassot i Gràcia Nova, la Vila de Gràcia, la Salut, Can Baró y el Baix Guinardó.
Del 7 al 20 de junio se llevarán a cabo los trabajos previos, que consistirán en actuaciones de demolición de aceras, retirada de arbolado y otras tareas necesarias antes de las obras. En todo momento habrá habilitado un carril de circulación por sentido y los itinerarios de peatones siempre estarán disponibles. Durante este periodo no habrá alteraciones en las paradas de bus, que se mantendrán operativas.
A partir del 20 de junio empezarán los trabajos de la primera fase de obras: en el lado del Besòs, en el tramo comprendido entre la calle de Ca l’Alegre de Dalt y la ronda Guinardó, y en el lado del Llobregat, entre la plaza de Joanic (incluida) y la calle de Ca l’Alegre de Dalt. Esta fase durará hasta diciembre del 2022.
Durante este periodo entre la calle de Ca l’Alegre de Dalt y la ronda del Guinardó se ocupará la calzada del lado del Besòs, dejando un carril de circulación por sentido. Mientras duren estas obras no se anulará ningún paso de peatones y se desplazará una parada de autobús a una ubicación próxima.
En el tramo comprendido entre la plaza de Joanic y la calle de Ca l’Alegre de Dalt se ocuparán tanto la plaza como el lado del Llobregat de la calle, manteniendo un carril de circulación en sentido descendente por el lado del Besòs. La circulación del sentido ascendente se desviará por las calles del Escorial y de Sant Lluís. Las obras en este tramo comportarán afectaciones en dos paradas de bus, que quedarán anuladas y se reubicarán en la calle del Escorial. También se anulará el paso de peatones de la calle de Joaquim Ruyra.
La segunda fase de obras será del mes de diciembre del 2022 al mes de mayo del 2023. Durante este periodo se trabajará en los lados de las calles opuestos a los tramos realizados. En todo momento se garantizará un carril por sentido, excepto en el tramo comprendido entre la calle de Sant Lluís y la plaza de Joanic, en que se habilitará el paso de vehículos en sentido descendente por el trazado definitivo y el sentido ascendente seguirá desviado por las calles del Escorial y de Sant Lluís.
La tercera fase de las obras empezará en mayo del 2023 y se terminará en octubre del mismo año. En este periodo se completarán los tramos de urbanización que queden pendientes.