Como gran novedad, se introducen ámbitos como la limpieza de pintadas de mobiliario, de elementos de infraestructura y de elementos patrimoniales. Para los elementos patrimoniales, habrá un servicio adaptado para edificios protegidos, en cumplimiento de la normativa vigente.
El nuevo contrato permitirá aumentar un 30 % el número de operarios y operarias, hasta llegar a 131 profesionales, y se prevé subrogar el personal actual. También se consolidarán todas las aportaciones tecnológicas para detectar y gestionar las pintadas que se pusieron en marcha con el contrato actual.
Cada año se hacen más de 123.000 actuaciones y se limpia una superficie de 300.345 metros cuadrados. El contrato se enmarca en el plan Cuidamos Barcelona, de mejora de la limpieza y el mantenimiento del espacio público en los diez distritos de la ciudad.