El documento, que tiene un presupuesto de 2,5 millones de euros, también prevé 25 medidas para dar apoyo al sector de la restauración después de la pandemia, entre las cuales destacan las siguientes:
- El refuerzo de una ventanilla única de la restauración para que sea de referencia para los profesionales y sus proyectos y trámites.
- Subvenciones y ayudas para potenciar la innovación y la sostenibilidad y para los restauradores que realicen inversiones y actuaciones para la transformación digital. También se quiere incorporar la temática de la restauración a las convocatorias ya existentes.
- Realización de planes de digitalización personalizados.
- Desarrollo de un programa formativo ajustado a las necesidades del sector y creación de una escuela de oficios de los gremios.
- Incorporación de la sostenibilidad en las actividades de emprendimiento, con la participación de Barcelona Activa, y facilitación de herramientas y proyectos a los restauradores en las temáticas ambientales más destacadas, como la reducción del desperdicio alimentario.
- Potenciar la restauración en los mercados municipales, facilitando y estimulando el producto de temporada fresco.
- Incorporar la gastronomía como uno de los principales atributos en las acciones de promoción turística, y conseguir la visibilidad de la alta gastronomía.
También se prevé la creación de mesas específicas para trabajar temas concretos que faciliten la interlocución entre el sector y el Ayuntamiento. La estrategia se ha elaborado con la colaboración de entidades del sector, como CETT, ESHOB, el Gremio de Restauración, la Asociación Barcelona Restaurantes Sostenibles, Slow Food Barcelona, Marcas de Restauración, la Fundación Alícia, Odela, BCD, CCOO Hostaleria, UGT Hostaleria y Inèdit.
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