El 3 de abril abre el túnel de las Glòries en sentido Llobregat

25/03/2022 - 10:07 h

Entre las calles de Bilbao y Padilla los vehículos no podrán circular por la Gran Vía en superficie y solo se permitirá el paso al tráfico de vecinos, servicios, transporte público y vehículos de emergencia, que tendrán que desplazarse por los laterales.

La noche del 2 al 3 de abril entrará en servicio la parte del túnel de las Glòries en sentido Llobregat. De esta manera quedarán abiertos los dos sentidos del túnel y se liberará así de manera definitiva todo el espacio que ahora ocupan los vehículos en superficie. La actuación permitirá soterrar el actual tráfico rodado que todavía circula por la superficie y generar un nuevo espacio para la ciudadanía libre de coches, con prioridad para los peatones, los vecinos y el verde.

La noche del sábado 2 al domingo 3 de abril, si las condiciones meteorológicas lo permiten, empezarán los trabajos de implantación de la nueva configuración vial. El objetivo es que el túnel en sentido Llobregat esté plenamente operativo hacia las 8.00 horas del domingo 3 de abril.


Modificaciones en la movilidad actual

La apertura del túnel en sentido Llobregat comportará modificaciones en la movilidad, la superficie de la plaza de las Glòries quedará completamente libre del tráfico privado y se permitirá el paso a peatones, bicicletas y transporte público (autobuses y taxis).

La principal novedad es la eliminación de los carriles de circulación en superficie que quedaban en la Gran Vía, entre la calle de Bilbao y la calle de Padilla. En este ámbito no habrá tráfico de paso y solo podrán desplazarse por los laterales los vehículos de vecinos, servicios, transporte público o de emergencia (tramo Bilbao-Independència y tramo Castillejos-Padilla).


Con la nueva configuración vial, los vehículos que circulen por el túnel tendrán al salir la opción de subir por la calle de Padilla (carril derecho) o bien por la calle de la Marina (carril central). En línea recta por la Gran Vía, desde el carril izquierdo, solo podrán circular los autobuses.

Antes de entrar en el túnel, a la altura de la rambla del Poblenou, habrá una salida hacia el lateral de la Gran Vía exclusiva para los autobuses y los taxis. El resto de vehículos que circulen por la C-31 y quieran acceder al lateral de la Gran Vía tendrán que utilizar la salida 207 Bac de Roda/Poblenou.

Las modificaciones provocarán la eliminación del actual giro desde el ámbito central de la Gran Vía en sentido Llobregat hacia la calle de la Independència. Los vehículos que utilizaban este itinerario para conectar con la calle de Aragó tendrán dos opciones: salir por la salida 207 Bac de Roda/Poblenou, continuar por Bac de Roda y después girar hacia Aragó o Mallorca, o bien seguir por la C-31 hacia el interior del túnel y llegar a Aragó a través de Padilla o la Marina.


La calle de la Llacuna quedará sin conexión con la Gran Vía en sentido Llobregat y únicamente restará operativo un carril para acceder al lateral mar, en sentido Besòs (vados y servicios). En el tramo entre la calle de Perú y la Gran Vía, la calle de la Llacuna se pacificará y se permitirá la circulación solo para uso vecinal y para acceder a la zona de carga y descarga del centro comercial.


Un gran impulso al transporte público

La nueva configuración vial del túnel de las Glòries supondrá una gran ganancia para el transporte público y especialmente para el transporte público metropolitano, que añadirá un carril específico de entrada a Barcelona a su paso por las Glòries.

Del mismo modo que el túnel en sentido Besòs, el sentido Llobregat dispondrá también de un nuevo tramo de carril bus que permitirá que los autobuses que vengan del carril bus de la C31 puedan enlazar con el de la Gran Vía, atravesar las Glòries y llegar hasta el centro de la ciudad con un carril.

Cada día entran por esta vía más de 250 autocares, incluyendo los interurbanos, regulares y discrecionales, y salen de la ciudad una cifra similar, lo que significa 15.000 personas de entrada y 15.000 más de salida en transporte colectivo.

Con respecto al tráfico privado, desde el derribo de la anilla vial ya se ha producido una disminución importante de los vehículos que circulaban por este ámbito, y se ha pasado de los 95.000 diarios (45.000 en sentido Llobregat y 50.000 en sentido Besòs) a los actuales 78.000 vehículos diarios (43.000 en sentido Llobregat y 35.000 en sentido Besòs).

Refuerzo de la vigilancia y planificación de las rutas

Durante los primeros días de puesta en servicio del nuevo sentido del túnel, la Guardia Urbana de Barcelona reforzará su presencia en la zona. Dado el volumen de modificaciones viales, el Ayuntamiento de Barcelona recomienda utilizar el transporte público. En caso de utilizar el vehículo privado, se aconseja salir con tiempo y planificar un margen adicional para hacer el desplazamiento.

Respuesta a reivindicaciones vecinales

El cambio en la configuración vial da respuesta a las demandas expresadas por los vecinos en el marco del Compromiso por las Glòries. La intervención permitirá suprimir finalmente la barrera que hasta hoy había existido en este ámbito y volver a unir barrios, distritos y ciudad. Una vez abiertos los dos sentidos del túnel, durante los próximos meses se llevará a cabo la adecuación y mejora de todo el ámbito, que ha estado en obras durante estos años.

Una nueva centralidad urbana

Con la puesta en marcha del sentido Llobregat concluye la construcción del túnel urbano de la plaza de las Glòries  que sigue el trazado de la Gran Vía (con dos tubos independientes con circulación unidireccional), con una longitud total de 957 metros. El primer tramo del túnel está situado entre la calle de Los Castillejos y la calle de Badajoz, y el segundo tramo de túnel va de la calle de Badajoz a la rambla del Poblenou.

La puesta en marcha de los dos sentidos del túnel y la correspondiente eliminación del tráfico privado en superficie abre la puerta a la recuperación de un amplio ámbito de espacio público de 14 hectáreas para Barcelona y permite generar una nueva centralidad urbana donde confluirán el verde (con un parque de 10 hectáreas), la vivienda pública, los equipamientos y el transporte público.

En abril del 2019 se abrió al uso ciudadano la primera fase del nuevo parque de las Glòries incorporando a la ciudad un pulmón verde de 20.400 metros cuadrados. En el 2021 se aprobó el plan urbanístico que ordenaba los usos de este ámbito y situaba los equipamientos públicos, las viviendas y el verde. Este mes de marzo han empezado las obras del proyecto «Canòpia-tranvía», que  incluye la urbanización asociada al recorrido del tranvía en el tramo comprendido entre las calles de Los Castillejos y de Badajoz a su paso por la plaza de las Glòries.

Con respecto a la parte central de la plaza, el ámbito “Canòpia-túneles”, en estos momentos se está redactando el proyecto ejecutivo de su urbanización. Además de eso, con la apertura del sentido Llobregat del túnel quedará libre un espacio en superficie de unos 30.000 metros cuadrados correspondiendo a la zona de la Gran Vía, entre la rambla del Poblenou y la calle de la Independència. Este ámbito se urbanizará, se creará un paseo verde y se transformará en un nuevo espacio ciudadano que unirá los barrios y apostará por la movilidad sostenible.