La campaña se ha organizado en colaboración con el Instituto Municipal de Personas con Discapacidad (IMPD) del Ayuntamiento de Barcelona, e incluye a tres testimonios reales de usuarios del transporte público.
Son Andrés Hinarejos, que tiene una lesión de la médula espinal y que en la campaña pregunta: «Si ocupas el espacio para silla de ruedas, ¿yo dónde me pongo?»; Lorena Blanco, que lleva una prótesis en la tibia y recuerda: «Tú quieres sentarte. Yo necesito sentarme. Respeta los asientos reservados», y Javier Rojano, que lleva una prótesis en la rodilla y explica: «Tú puedes ir por las escaleras. Yo necesito el ascensor».
Prioridad y visibilidad
La campaña busca fomentar el uso cívico de los asientos y los espacios reservados del transporte público, así como la prioridad en los ascensores, a la vez que quiere dar visibilidad al colectivo de personas con movilidad reducida y otras discapacidades.
También se han hecho varias actuaciones para mejorar la visibilidad y para hacer más comprensibles las indicaciones de todos los elementos. Recientemente se han colocado carteles nuevos en todos los ascensores de la red que destacan la prioridad absoluta de estos colectivos, se han hecho mejoras importantes en los asientos y espacios reservados de los nuevos trenes y se ha instalado una nueva señalización en los autobuses que resalte todavía más la prioridad en estos espacios.
La accesibilidad en TMB
Desde el año 2007, toda la red de autobuses de TMB (1.135 vehículos) está preparada para transportar a personas con discapacidad y movilidad reducida. Los vehículos incorporan rampas, una plataforma baja, suelo antideslizante, áreas reservadas para personas usuarias de sillas de ruedas y asientos de uso preferente para personas con movilidad reducida. También incluyen pulsadores con sistema braille para personas con discapacidad visual y un sistema de información visual y acústica para personas con discapacidad sensorial en los vehículos y en muchas paradas.
Con respecto a la red de metro, del total de 165 estaciones hay 153, un 93 %, que están equipadas con ascensores de conexión entre la calle, el vestíbulo y los andenes. Del 8 % restante, cuatro estaciones (los intercambiadores de Espanya y Maragall) están en obras y el resto en licitación o tramitación, a cargo del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat.