El objetivo es reforzar el alumbrado de la ciudad y combatir los puntos oscuros, siguiendo los criterios establecidos en el Plan director de iluminación.
Puntos oscuros
En los últimos años se ha trabajado conjuntamente con los distritos para identificar los puntos oscuros y encontrar soluciones, siempre con perspectiva de género, y se continuará con el desarrollo de actuaciones en este sentido. En total, los últimos años se ha actuado en 136 puntos oscuros. En el 71 % de los casos se incorporaron más puntos de luz o se reforzaron, y en el 29 %, se hicieron reorientaciones de los puntos de luz existentes.
Criterios para la renovación del alumbrado
- Mejora de la sensación lumínica: luz mejor repartida gracias al uso de ledes (luz blanca)
- Más uniformidad lumínica para evitar manchas de luz
- Aumento de la luz en la acera y priorización de las zonas de peatones
- Reducción de la altura del punto de luz en la acera (por debajo de 5 metros) y siempre por debajo de la copa de los árboles
- Diferente temperatura de color en la calzada y la acera, para aportar calidez a los peatones y diferenciar los espacios para las personas y para los vehículos
- Aumento de la telegestión y, por lo tanto, más eficiencia energética y optimización de las operaciones con sistemas de control y regulación
¿En qué calles se intervendrá?
Se intervendrá en calles de todos los distritos. Consulta los detalles de las intervenciones.
Gestión eficiente e innovación
La inversión actual permitirá llegar en torno al 35 % de alumbrado con ledes, que ahora representa el 26 %. Además de la renovación del alumbrado, también es indispensable el servicio de mantenimiento, que permite introducir mejoras, como regular el encendido y apagado según las zonas y las franjas horarias, implantar sistemas de iluminación inteligentes y tener capacidad de reacción rápida en caso de situaciones críticas como temporales.
Actualmente Barcelona tiene un sistema de control centralizado que permite hacer el seguimiento de las incidencias con más repercusión y asegurar el funcionamiento del alumbrado. Este control centralizado también permite la detección de averías, la reprogramación de los horarios, el control dinámico de la luminosidad (ajuste del horario de encendido y apagado según las condiciones de cada zona) y la simulación de consumo de las instalaciones.
En los próximos años se seguirá avanzando para renovar los dispositivos de control, aumentar la telegestión (actualmente hay un 54 % de centros de mando telegestionados) y mejorar los sistemas de comunicación. También está previsto aumentar los elementos de alumbrado autosuficiente, como las farolas solares o la conexión con instalaciones de autoconsumo en el espacio público.
El alumbrado de Barcelona
Barcelona tiene en la actualidad 151.000 puntos de luz públicos y representan el 20 % del consumo total de energía del Consistorio. Hay que destacar que este porcentaje de consumo es muy inferior al de la media de municipios, que se sitúa en torno al 50 %.