Derechos Sociales, Cultura, Educación y Ciclos de Vida

Ya son unas 80 las prácticas reconocidas durante los diez años de trayectoria del proyecto de Buenas Prácticas Sociales, que busca identificar y difundir buenas prácticas en el ámbito de actuación del Área de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Barcelona.

En el marco de la VIII Jornada de Reconocimiento de las Buenas Prácticas Sociales, organizada por el Área de Derechos Sociales, Salud, Cooperación y Comunidad del Ayuntamiento de Barcelona, diez experiencias del ámbito de la atención social han sido reconocidas como buenas prácticas. Con éstas ya son unas 80 las prácticas reconocidas durante los diez años de trayectoria de este proyecto.

La jornada ha contado con la conferencia de Amalio Rey como experto en facilitación de procesos que aprovechen la inteligencia colectiva, y las prácticas reconocidas han sido:

• El grupo Gran Hort, un espacio de encuentro para las personas mayores para prevenir el sentimiento de soledad.
• El programa de actividades culturales de estimulación cognitiva en centros residenciales, para paliar el impacto de la pandemia en las personas mayores mediante actividades de ocio, cultural y estimulación cognitiva.
• La promoción de vivienda de alquiler y cesión de uso por parte de entidades sociales, en el marco de la colaboración publico-social-comunitaria para ampliar el parque de vivienda pública.
• El Banco del movimiento, una red solidaria que da acceso a productos de apoyo para promover la autonomía y la vida independiente.
• El proyecto Odontología social, que busca facilitar el acceso a la atención odontológica a personas en situación de vulnerabilidad.
• El proyecto Alimenta, que intenta avanzar al garantizar el derecho a la alimentación de una forma inclusiva y se digna.
• El modelo para el abordaje y promoción de la salud sexual en los Centros Abiertos, con el objetivo de visibilizar la salud sexual de niños y adolescentes en estos centros.
• El teléfono de prevención de la conducta suicida, que parte de la metodología de la escucha activa.
• El ocio inclusivo en los centros cívicos, que busca dar apoyo a la participación de las personas con discapacidad y mejorar la accesibilidad de estos equipamientos.
• Los APROP, alojamientos de estancia temporal de construcción rápida, sostenible y de calidad.

Favorecer el aprendizaje y promover la evaluación

El proyecto de las Buenas Prácticas Sociales busca identificar, recoger y difundir buenas prácticas en el ámbito competente del Área de Derechos Sociales, ya sean propias municipales o en participación con el tercer sector u otras administraciones. Se busca destacar el conocimiento de las personas profesionales, favoreciendo la auto-reflexión, el aprendizaje entre iguales, la rendición de cuentas y promover una cultura de la evaluación.

Por “buena práctica” se entiende las experiencias o proyectos que han obtenido buenos resultados en un determinado contexto y que se espera que, en contextos parecidos, también permitan conseguir resultados similares. Para formar parte de las Buenas Prácticas Sociales hace falta que la práctica supere diversos criterios técnicos de acceso. El equipo de valoración, integrado por profesionales del Área de Derechos Sociales, se encarga de valorar a cada una de las que se presentan. Éste dispone del apoyo metodológico y documental del mundo académico, que complementa y enriquece el proceso.