En total, se han renovado 14.000 m2: se han convertido las calles en plataforma única y se han ampliando los metros destinados al paseo, así como las zonas de estancia, parterres, verde, arbolado y puntos de carga y descarga de vehículos.
La apuesta por la movilidad sostenible es central en el plan Superisla Barcelona, que se está extendiendo por toda la ciudad. En el caso concreto de la reforma de las calles de los Almogávares y de Zamora, ha supuesto reducir los carriles de circulación y destinarlos únicamente a los vehículos del vecindario a velocidad reducida y al paso de vehículos de servicios. Las bicicletas podrán circular en los dos sentidos por los nuevos espacios pacificados.
Además, al cruce entre las dos calles se añade una plaza de unos 2.000 m2, que se convierte en una zona verde y de estancia con grandes parterres circulares al centro.
La calle del siglo XXI con Respecto al mobiliario urbano, se han colocado nuevos aparcamientos de bicicletas y nuevo alumbrado con farolas de columna vertical, se ha restaurado la fuente del chaflán de Almogávares con Pamplona y se han plantado más arbustos y árboles como almeces, robles, laureles o bellaombres. También estos nuevos esos verdes utilizarán la red Districlima, que permite calentar los edificios y el agua sanitaria de manera más eficiente, el sistema de drenaje SUR, para reducir el riesgo de inundaciones, y la red de recogida neumática.
La incorporación del eje verde de Almogávares y Zamora no es una intervención puntual y aislada, sino que forma parte del nuevo modelo de calle del siglo XXI del plan Superisla Barcelona, que próximamente también se implantará al Eixample. La previsión es que en el 2030 en la zona del 22@ una de cada tres calles horizontales y verticales pase a ser eje verde con un 70% del espacio dedicado a los peatones y la naturaleza, que comportará, además, una conectividad mejor desde las Glorias y la Meridiana hasta el Besòs y el Maresme.
Por eso, los meses próximos se pondrán en marcha los proyectos siguientes, que renovarán más de 3 hectáreas de espacio público y dispondrán de una inversión de más de 20 millones de euros:
- Eix Cristóbal de Moura: actualmente ya está ejecutado entre las calles de Fluvià y Provenzales, y en enero empezarán las actuaciones entre Maresme y Josep Pla. Será un parque de unos 25 metros de anchura a lo largo de ocho islas, entre Umbría de Rueda y Maresme, que unirá el parque Central del Poblenou con el parque del Besòs.
- Eje Puigcerdà: une la calle del Perú y la calle de Pallars, e incluirá también la pacificación de la calle de Venezuela, entre Maresme y Josep Pla.
- Eje Almogávares: en los ámbitos ya renovados Joan de Austria – Pamplona y Roc Boronat – Badajoz se sumará lo que va de la calle de Roc Boronat a Badajoz.
- Eje Zamora: además del tramo acabado ahora, Almogávares – Pere IV, se actuará para que vaya también de Pujades a Llull.
- Eje Bolivia: se reformará el ámbito comprendido entre la calle del Maresme y el de Josep Pla.
La regeneración de todos estos tramos en este mandato supondrá ganar cuatro plazas nuevas a la trama Cerdà: la ya acabada entre Almogávares y Zamora, una entre Puigcerdà y Venezuela, una entre Puigcerdà y Bolivia y otra entre Cristóbal de Moura i Puigcerdà.
Además, estas actuaciones se sumarán a otras reurbanizaciones y pacificaciones que se han impulsado desde el 2015 en Sant Martí como la superisla del Poblenou, la plaza de Dolors Piera y el espacio de los jardines de Casa la Endrina, el eje de Pedro IV y las obras de las calles de Tánger, Pamplona, Álava y Marruecos, enfocadas a devolver el espacio público para el uso ciudadano y potenciar la movilidad sostenible. Así en el 2023 se habrán regenerado y mejorado un total de casi 23 hectáreas de espacio público, el equivalente en unas 18 islas de la trama Cerdà, que pondrán la vida cotidiana en el centro, cohesionarán los barrios y favorecerán la sostenibilidad.