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El gas es escaso y cada vez más caro, por lo que es importante conocer las formas en las que podemos evitar pagar más en nuestra factura. Por eso, te brindamos la oportunidad de interpretar y comprender mejor la factura del gas. Para hacerlo, es especialmente importante saber si estamos en el mercado regulado o en el libre:

• Mercado regulado: Se trata de una tarifa semiregulada, es decir, con un precio variable. Se actualiza normalmente cada tres meses en función de los precios del mercado mayorista de gas y de la tarifa de acceso que tenemos contratada, la cual varía según el consumo anual. Se puede identificar en la factura con el nombre de ‘Tarifa de último recurso’ o ‘TUR’.
• Mercado libre: Puede ofrecer cualquier tarifa a cualquier precio. Es decir, el precio fluctúa según las variaciones de la economía.

Principalmente, en la factura del gas se cobran cuatro conceptos: el término fijo, el término variable, el alquiler del contador y los impuestos.

1. Término fijo: Se paga para poder disponer de gas y es variable en función de la tarifa.

2. Término variable: Es lo que pagamos por la energía consumida (kWh) durante el período de facturación. El precio varía según la tarifa.

3. Alquiler del contador: El contador es, generalmente, de la compañía distribuidora y se paga en cada factura como concepto de alquiler.

4. Impuestos: La factura de gas incluye dos impuestos, el impuesto sobre los hidrocarburos (0,00234€/kWh), que se calcula sobre el término variable, y el IVA (21%), sobre el total de la factura.

5. Otros conceptos: En algunos casos, también se pueden encontrar otros conceptos en la factura, como regularizaciones por actualizaciones relacionadas con la normativa que tengan carácter retroactivo. En las facturas del mercado libre también es habitual que se ofrezcan servicios adicionales que no están relacionados con el suministro de gas, como por ejemplo el mantenimiento de la caldera.

En el mercado regulado existen tres opciones de contratación del suministro:

• TUR 1: Consumo inferior a 5.000 kWh anuales.
• TUR 2: Consumo entre 5.000 kWh y 15.000 kWh anuales.
• TUR 3: Consumo entre 15.000 kWh y 50.000 kWh anuales.

Además, la factura de gas proporciona información sobre el suministro. Destacamos la siguiente:

0. Logotipo e información de la comercializadora con la que tenemos contrato (CIF, denominación social y domicilio social).

1. Datos de la factura (número de la factura, período de facturación, etc.).

2. Resumen de la facturación (incluye el precio total a pagar en la factura desglosado por conceptos).

3. Información del consumo de gas: Consumo de energía en la totalidad del período expresado en kWh. También se puede encontrar la lectura (medida en m³) y el factor de conversión a kWh, que es la unidad utilizada para la facturación.

4. Datos del contrato: En este apartado encontramos toda la información necesaria sobre el punto de suministro y los datos contractuales, que son indispensables para realizar gestiones con nuestra comercializadora actual o futura, como el titular, la dirección o el CUPS (código unificado del punto de suministro).

Reducir el gasto en 4 pasos

En esta cápsula descubrirás, en tan solo cuatro pasos, cómo puedes cambiarte al mercado regulado y así reducir el gasto de gas en tu hogar:

1. Busca el tipo de contrato que tienes (si es del mercado libre o el regulado).

2. Busca el CUPS (Código Universal Punto Suministro).

3. Si es necesario, llama a tu compañía y solicita el cambio al mercado regulado.

4. Verifica que no haya renovaciones automáticas del contrato o periodos de permanencia.

Es importante tener en cuenta que no todas las compañías ofrecen el mercado regulado, por lo que puede ser necesario cambiar de compañía.

El Ayuntamiento de Barcelona, además, cuenta con Puntos de Asesoramiento Energético (PAE), un servicio que ofrece la información, la atención y la intervención necesarias para que las personas puedan ejercer sus derechos energéticos y las compañías no les nieguen el acceso a los suministros básicos.

Para ser atendido, se puede contactar con los PAE a través del teléfono, correo electrónico o de forma presencial en las diferentes oficinas distribuidas por la ciudad. Para obtener más información sobre las formas de contacto y el servicio, puedes consultar este enlace.