Usted está aquí

Proyecto piloto B-MINCOME. Combinando una renta mínima garantizada y políticas sociales activas en zonas urbanas desfavorecidas de Barcelona

B-MINCOME fue un proyecto piloto de lucha contra la pobreza y la exclusión social cofinanciado por el programa Urban Innovative Actions (UIA) de la Unión Europea y dirigido por la Dirección de Innovación Social del Área de Derechos Sociales, Justícia Global, Feminismos y LGTBI del Ayuntamiento de Barcelona.

El proyecto iba dirigido a hogares en situación de vulnerabilidad residentes en los barrios del Eix Besòs de la ciudad. En tanto que se trataba de un proyecto experimental, el objetivo era testear la eficacia y la eficiencia de una política innovadora e integral que combinaba una transferencia monetaria, el llamado Apoyo Municipal de Inclusión (SMI), con cuatro políticas activas de inclusión sociolaboral. Mediante la combinación de estas políticas se pretendía crear un ecosistema que contribuyera a ayudar a los hogares participantes a cubrir sus necesidades básicas y a adquirir una mayor autonomía y capacidad de decisión sobre sus vidas.

El proyecto incluía la elaboración de una evaluación compleja para medir su impacto y su proceso de implementación.

Calendario y presupuesto
B-MINCOME tuvo una duración global de 3 años (01/11/2016 - 30/10/2019) y recibió financiación de 4,85 millones de euros por parte del programa Urban Innovative Actions (UIA). El primer año se dedicó a la preparación del diseño experimental, diagnosis, muestreo y obtención de datos.
 
Durante los dos años siguientes tuvo lugar la intervención y cierre de la evaluación. A lo largo de los años 2020 y 2021 se elaboraron y concluyeron los informes de evaluación y los principales materiales de difusión.
Partenariado
Aparte del Ayuntamiento de Barcelona, ​​el consorcio que desarrolló el proyecto B-MINCOME estaba formado por Ivalua (Instituto Catalán de Evaluación de Políticas Públicas), NOVACT (Instituto Internacional para la Acción Noviolenta), IGOP (Instituto de Gobierno y Políticas Públicas) e ICTA (Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales) de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), The Young Foundation y el Data Management Group de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).
Población participante
El proyecto B-MINCOME se dirigió a 1.000 hogares en situación de vulnerabilidad y residentes en los diez de los barrios que conforman el llamado Eix Besòs: Ciudad Meridiana, Vallbona, Torre Baró, Roquetes y Trinitat Nova del distrito de Nou Barris; Trinitat Vella, Baró de Viver y el Bon Pastor del distrito de Sant Andreu; y la Verneda y La Pau, y el Besòs y el Maresme del distrito de Sant Martí. Ésta es una de las zonas con tasas más elevadas de hogares en situación de vulnerabilidad y que agrupa a muchos de los barrios con menos renta familiar disponible de la ciudad.
 
Para poder participar en el proyecto, los hogares debían cumplir los siguientes requisitos:
  • Ser usuaria de los servicios sociales municipales.
  • Empadronamiento en Barcelona de todos sus miembros, residencia en uno de los barrios del Eix Besòs y compromiso a hacerlo durante el transcurso del proyecto.
  • Al menos uno de sus miembros debía tener entre 25 y 60 años.
  • Existir convivencia efectiva de todos los miembros del hogar.
  • Aceptar las condiciones de prestación de la ayuda en la modalidad adjudicada y aceptar su cobro del 25% en la moneda ciudadana REC.
  • Consentir en ser entrevistado y permitir la obtención de datos.
  • Tener unos ingresos familiares del año anterior que no superen el coste anual de las necesidades básicas del hogar calculado por el proyecto.
  • Tener un patrimonio no superior a cuatro años el valor de la ayuda estimada del Apoyo Municipal de Inclusión, diseñado en el marco del proyecto.
Diseño experimental
El proyecto B-MINCOME se basó en la metodología de los ensayos con control aleatorizado (RCT, de sus siglas en inglés), mediante la cual se seleccionaron aleatoriamente los hogares participantes en grupo de tratamiento y grupo de control. Asimismo, se seleccionaron aleatoriamente las diferentes modalidades de participación que recibirían los hogares del grupo de tratamiento: condicionada o no condicionada, en función de si la participación en la política activa asignada era obligatoria o no para poder percibir la ayuda SMI; y limitada o no limitada, en función de si cualquier variación de los ingresos computables del hogar comportaba una variación proporcional o parcial del SMI estimado inicialmente. La combinación de estas modalidades, junto al grupo de control, conformaron el esquema del diseño experimental del proyecto.
 
A partir de un universo de 5.000 hogares potencialmente participantes se llevó a cabo una estrategia comunicativa para informarlos del proyecto y ayudarlos en la tramitación de la solicitud. Se recibieron 2.525 solicitudes, de las que 1.527 cumplían todos los requisitos. Posteriormente se realizó la selección aleatoria de los hogares participantes (en los grupos de tratamiento y en el grupo de control). Una vez celebrado el sorteo la cifra de personas participantes disminuyó ligeramente porque algunas al final no tomaron parte del proyecto principalmente porque no cumplían los requisitos, rechazaban participar o era imposible contactarlas. Por último, fueron 950 el número total de hogares participantes en los grupos de tratamiento (531 percibiendo la ayuda económica SMI en combinación con una política activa y 419 percibiendo sólo la ayuda económica SMI) y 383 en el grupo de control.
Apoyo Municipal de Inclusión
El Apoyo Municipal de Inclusión (SMI, de sus siglas en catalán) fue la ayuda económica de urgencia social diseñada en el marco del proyecto. El SMI era una prestación para el conjunto del hogar, complementaria y subsidiaria a otras prestaciones e ingresos del hogar (por ejemplo, la Renta Garantizada de Ciudadanía, la prestación por desempleo, las pensiones o los ingresos laborales), no tenía carácter de derecho subjetivo, era temporal (por el período de dos años de duración del proyecto) y se orientaba a garantizar un “umbral básico” para cubrir necesidades básicas y de vivienda.
 
Para las necesidades básicas mensuales del hogar, el SMI se estableció en 402€ por la primera persona adulta y 148€ por cada miembro adicional del hogar. Por las necesidades de vivienda, establecía 260€ para la primera persona adulta, 110€ por la segunda y 40€ por cada miembro adicional. La cuantía final de la ayuda que recibía un hogar del B-MINCOME era resultado de la diferencia entre, por un lado, el “umbral básico” establecido por el proyecto y, por otro, los ingresos netos de todos los miembros del hogar. El importe estaba sujeto a los cambios que pudieran experimentar los hogares tanto en lo que se refiere al volumen de ingresos como por su composición.
Políticas activas de inclusión
A diferencia de proyectos de renta como los que se hicieron aquellos mismos años, el piloto de Barcelona optó estratégicamente por combinar políticas activas sociocomunitarias con transferencia monetaria en población altamente vulnerable, y por separar la atención social del seguimiento administrativo de la ayuda económica SMI. Todo ello representaba un esquema innovador para intentar ir más allá de los enfoques parciales y no integrales de política pública que pretenden combatir situaciones de pobreza y exclusión social. Las cuatro políticas activas del proyecto fueron las siguientes:
 
  • Política de formación y empleo: buscaba mejorar la empleabilidad y el acceso al mercado laboral mediante la combinación de formación y planes de empleo de 12 meses en proyectos implementados en el Eix Besòs y en colaboración con entidades sociales. La formación constaba de un curso de profesionalización certificada (340 horas), una formación continua (60 horas) y una formación en orientación laboral (80 horas). La política se diseñó e implementó con Barcelona Activa, el Consorcio de Educación de Barcelona, ​​los distritos del Eix Besòs (Nou Barris, Sant Andreu y Sant Martí) y entidades sociales.
  • Política de emprendimiento social: pretendía familiarizar a los participantes con la economía social y solidaria como alternativa al mercado laboral tradicional, combinando una parte de formación con otra de promoción de proyectos de emprendeduría colectiva. La política se diseñó e implementó con el Comisionado de Economía Social, Desarrollo Local y Política Alimentaria y Barcelona Activa, junto a diversas entidades del sector.
  • Política de ayudas a la rehabilitación y el alquiler de habitaciones: buscaba favorecer que los participantes propietarios de su vivienda pudieran poner en alquiler de forma permanente y a un precio regulado una habitación para conseguir unos ingresos adicionales que mejoraran su renta familiar disponible. La política fue diseñada en colaboración con el Instituto Municipal de la Vivienda y Rehabilitación de Barcelona (IMHAB), pero no pudo implementarse completamente por falta de participantes que cumplieran los requisitos.
  • Política de participación comunitaria: fomentaba la implicación de las personas participantes y sus familias en la vida social y comunitaria de sus barrios mediante la habilitación de espacios de participación, cohesión grupal e identificación de necesidades para generar proyectos compartidos. La política fue diseñada e implementada por la Dirección de Servicios de Acción Comunitaria del Ayuntamiento de Barcelona en colaboración con diversas entidades sociales y de dinamización.
Moneda ciudadana
Paralelamente al proyecto B-MINCOME, se puso en marcha en la ciudad la moneda ciudadana digital REC (Recurso Económico Ciudadano o Real Economy Currency) con el objetivo de contribuir a generar nuevos circuitos económicos, revitalizar el pequeño comercio, fomentar economía circular, construir vínculos relacionales y aumentar la percepción de seguridad y confianza.
 
Con la voluntad de multiplicar el impacto local del SMI, se estableció que un 25% de la ayuda se transferiría mediante esta moneda virtual. El objetivo era garantizar que esta parte del SMI se destinara a la compra de bienes y servicios ofrecidos por establecimientos de proximidad ubicados en los barrios del Eix Besòs adheridos a este nuevo sistema. El resultado de la implementación de esta moneda, así como su impacto y efecto multiplicador del gasto realizado en riegos en comparación con el hecho en euros, fue evaluado durante el proyecto.
Consejo asesor
Durante el proyecto se creó el Consejo Asesor para el Apoyo Municipal de Inclusión. Iniciado en 2017, fue un órgano de asesoramiento, debate y seguimiento de la ayuda económica impulsada por el B-MINCOME y podía asesorar también en otras políticas de renta como el Fondo de Infancia 0-16.
 
El Consejo lo formaban personas del ámbito científico (universidades y asesores independientes), social (entidades del Consejo Municipal de Bienestar Social y otros) e institucional (referentes de diversas áreas del Ayuntamiento y de otras administraciones que gestionan ayudas sociales y políticas de garantía de rentas, así como representantes de los grupos municipales). En 2018 se invitaron a entidades participantes en el despliegue de algunas de las políticas activas del proyecto B-MINCOME.
Informes de evaluación del proyecto
La pretensión del proyecto B-MINCOME, dado su carácter experimental, fue analizar su evolución y evaluar su impacto en términos de eficacia y eficiencia. Para conseguir las evidencias necesarias, se realizó una investigación rigurosa que combinaba técnicas cuantitativas y cualitativas y diversas estrategias analíticas. El objetivo último era que la evaluación del proyecto permitiera obtener información para comprender con claridad cómo diseñar e implementar políticas sociales más eficientes y eficaces. Varios socios del partenariado participaron en esta evaluación.
 
Los resultados son informativos tanto para futuros experimentos de renta como para introducir otras innovaciones en el ámbito de las políticas sociales. Sin embargo, la interpretación de los resultados no puede olvidar el perfil de complejidad de los participantes (fueron finalmente hogares más vulnerables que la media de la población de Barcelona en riesgo de pobreza y también personas usuarias de los servicios sociales municipales) así como la duración limitada de dos años.
 
Informes generales
Informes de los socios
Documentación adicional
Notes de prensa (catalán)
Noticias
Boletines del proyecto
Otros materiales