27/06/2021 - 10:09
Educación. El proyecto se ampliará después del éxito de los dos primeros años de funcionamiento.
Una vez acabado el segundo curso, la Escuela Municipal de Segundas Oportunidades (EM2O) cierra la etapa como proyecto piloto y afronta el próximo año con el objetivo de abrir como un servicio socioeducativo para abordar el abandono escolar consolidado. Actualmente, forman parte del proyecto 55 alumnos, de los que 25 accedieron a la escuela en septiembre del 2019 y 30 en septiembre del 2020.
El proyecto, creado en el 2019, quiere ofrecer 15 plazas más con el fin de poder incorporar a 45 jóvenes cada año. Además, se plantea ampliar el ámbito de actuación más allá del barrio de Navas, con la apertura de una antena en el Espacio Joven de las Basses, en el distrito de Nou Barris, y ampliar el itinerario formativo de dos a tres años en los casos en que haya que consolidar el trabajo socioeducativo.
Buena parte de los jóvenes son de procedencia extracomunitaria, con un predominio de chicos, de familias de rentas bajas, residentes en los distritos de Sant Andreu, Sant Martí y Nou Barris, y que mayoritariamente no se han graduado en la ESO. Llegan derivados del Consorcio de Educación de Barcelona, del Instituto Municipal de Servicios Sociales y de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia.
El centro hace un buen balance del impacto de la pandemia en este curso, ya que, a pesar de los meses de confinamiento, se ha conseguido mantener la vinculación del alumnado con la escuela. Un total de 17 de los 25 jóvenes de este segundo año están haciendo formaciones posobligatorias, y, por lo tanto, han vuelto al sistema educativo, y 8 hacen formaciones profesionalizadoras para una futura inserción laboral.
Un proyecto de éxito
La Escuela Municipal de Segundas Oportunidades abrió en el 2019 como el primer servicio municipal de estas características en Cataluña, donde sí hay servicios de entidades sociales. El proyecto se enmarca en las políticas de equidad educativa promovidas por el Ayuntamiento que complementan otros programas y servicios de acompañamiento, orientación y prevención del abandono escolar prematuro en la ciudad.
El servicio tiene como objetivos acompañar y capacitar a estos jóvenes para que puedan trazar un proyecto de vida propio y vuelvan al sistema educativo o tengan un proyecto profesional. Durante dos años, reciben formación en competencias básicas y transversales, y hasta 1.000 horas de formaciones técnico-profesionales gratuitas.
Además, se desarrollan actividades de ocio educativo y deporte una vez a la semana, y se cubren los gastos de transporte y un desayuno reforzado.