En el vehículo
En el garaje de casa
- Asegúrate de que no entra contigo ningún desconocido cuando abras la puerta de acceso al garaje.
- Espera a que se cierre la puerta tras de ti, tanto a la hora de entrar como a la hora de salir, antes de reanudar la marcha. Hay que regular el temporizador al mínimo.
- Recuerda cerrar con llave la puerta de acceso de vecinos y vecinas cuando entres o salgas a pie del garaje.
- Llévate la tarjeta o el mando de apertura del garaje.
- Evita dejar paquetes y objetos a la vista en el interior del vehículo (bolsos, tarjetas, documentos, aparatos electrónicos, etc.).
- Cierra el vehículo con llave, y asegúrate de que dejas las ventanas totalmente cerradas y, si tienes, la alarma conectada.
En parkings públicos
- Evita dejar objetos o paquetes a la vista.
- Aparca, si es posible, en una plaza próxima al cajero o dentro del ángulo de visión del personal de vigilancia o de las cámaras de seguridad.
- No olvides cerrar el vehículo con llave y asegúrate de que las ventanas están totalmente cerradas.
- Llévate la tarjeta de control de entrada.
Al aparcar en la calle
- Evita dejar objetos en el interior del vehículo que sean visibles desde fuera (ropa, bolsas, carteras, llaves, tarjetas, teléfonos, etc.).
- Comprueba que el volante está bloqueado y los cristales de las ventanas completamente cerrados al bajar del vehículo.
- Activa los dispositivos antirrobo que incorpore el vehículo (alarma, desconectador de batería, bloqueador de volante, pedales, etc.).
Mientras circulas
- Asegúrate de que las puertas están bloqueadas y las ventanas cerradas, especialmente cuando te detengas en un semáforo.
- Desconfía de las personas que te ofrezcan servicios u objetos de manera ambulante. No abras las ventanas ni desbloquees los fiadores en ningún caso.