En el comercio
Sistemas de seguridad
- Dota de sistemas de cierre seguro todos los accesos en el establecimiento, incluidos los del almacén, patios, escaleras y ventanas. Estos sistemas tienen que poder permitir la evacuación de las personas en caso de emergencia.
- Instala un sistema de alarma visible desde el exterior y conectado a una centralita de vigilancia de concierto con la policía.
- Haz visibles todos los elementos de protección de que dispone el establecimiento: alarmas, cajas de seguridad, extintores y mangueras.
- Considera el refuerzo de espacios comunes (vestíbulos, escaleras, etc.) o elementos de separación (puertas y tabiques) si el local colinda con otros edificios.
- Si el tipo de negocio lo permite, es aconsejable instalar un sistema de timbre y control en la apertura de la puerta de acceso, ya sea un pasador o bien sistemas de activación remota.
- Es recomendable instalar un pulsador de alarma silenciosa.
- Instala sistemas de intercomunicación (teléfonos, interfonos, walkies-talkies, etc.) entre las diferentes zonas del establecimiento.
- Valora la conveniencia de instalar sistemas que permitan ver todos los rincones del establecimiento (espejos, cámaras, etc.), ya que, además de facilitar la vigilancia, son disuasivos.
- Cuelga el plano del recorrido de evacuación del plan de emergencia, ya que, en caso de necesidad, facilitará las operaciones tanto de los bomberos como de la policía.
Operativo diario
- Asegúrate de que no queda nadie dentro del establecimiento antes de cerrar. No olvides conectar los sistemas de alarma.
- Mantén encendida alguna luz de la fachada durante las horas en que el establecimiento permanece cerrado. Disuadirá de la manipulación de cerraduras y persianas.
- Establece códigos de comunicación entre el personal, de manera que en caso de cualquier tipo de incidente os podáis comunicar sin alarmar a los clientes.
- Instala sistemas de protección mecánicos o electrónicos en los artículos expuestos en venta y mantén fuera del alcance del público los de más valor.
- Lleva un registro de los artículos que están en exposición en la tienda y de los que tengas en el almacén. Te ayudará a inventariar las pérdidas tras un robo.
- No esperes a hacer el recuento de caja en el último momento, antes de cerrar. Es mejor que lo hagas acompañado o acompañada y en un lugar apartado de la vista del público.
- Fija un límite máximo de dinero en la caja registradora y ves retirando durante el día las cantidades de dinero que lo excedan, dejando solo lo que necesites para devolver el cambio. Según las características del comercio, valora la conveniencia de instalar cajas de seguridad con apertura codificada y retardada en un lugar bien visible al público, indicando que el personal del establecimiento no tiene acceso a estas.