En la anterior campaña de este tipo, realizada del 10 al 16 de febrero, la Guardia Urbana tramitó un total de 1.217 denuncias.
El Plan de movilidad urbana (PMU) municipal plantea un conjunto de medidas encaminadas a dar más protagonismo a los peatones y a los ciclistas, a fomentar el uso del transporte público colectivo y a reducir el uso del vehículo privado. Su finalidad es mejorar la calidad de vida de la ciudad, la seguridad vial y la eficiencia del conjunto del sistema de movilidad.
En este sentido, la ciudad de Barcelona dispone de una red de transporte público de superficie formada por autobuses, tranvías y taxis que permite conectar todos los barrios y distritos entre sí, así como la ciudad con municipios próximos, de manera segura, eficiente y sostenible.
El objetivo de la campaña de actuación activada hoy es asegurar el buen funcionamiento y la fluidez de este transporte público de superficie en general y, especialmente, el de autobuses y taxis. Para ello, pone una atención especial en detectar y corregir las infracciones relacionadas con:
- Estacionamientos incorrectos y paradas antirreglamentarias en los carriles bus, los carriles reservados y las paradas de transporte público.
- Circulación de vehículos no autorizados por carriles reservados (bus y taxi).