La Guardia Urbana activa hasta el domingo, 10 de marzo, un dispositivo de control de vehículos de movilidad personal (VMP) para reducir la siniestralidad, tanto en número de accidentes como de víctimas, y la gravedad de las lesiones ocasionadas.
El objetivo es controlar tanto el uso y la circulación correctos de los VMP como las obligaciones relativas a la conducción de otros tipos de vehículos con motor que puedan poner en riesgo a peatones y otros vehículos.
Se corregirán las infracciones relacionadas con los estacionamientos inadecuados, las distracciones durante la conducción, no respetar la luz roja del semáforo o los pasos de peatones y, en general, las que comporten una circulación de riesgo y conflictos de seguridad vial con el resto de usuarios y usuarias en las aceras y en las calzadas.
Con respecto a las obligaciones, las personas usuarias de este tipo de vehículos deben recordar lo siguiente:
- Los VMP son catalogados como vehículos y, por lo tanto, no pueden circular por las aceras o las zonas de peatones.
- Hay que evitar las distracciones, y está prohibido mirar el móvil o manipular otros dispositivos electrónicos mientras se conduce.
- Hay que reducir la velocidad y extremar las precauciones cuando se cruza un paso de peatones para evitar situaciones de conflicto.
- La edad mínima para conducir un VMP o un ciclo de más de dos ruedas es de 16 años (en caso de transportar a personas con un dispositivo homologado, hay que tener la mayoría de edad).
- La contratación de un seguro de responsabilidad civil frente a terceros es obligatoria en caso de que se desarrolle una actividad comercial. Para uso personal también se recomienda tener seguro.
La mejora de la seguridad vial se enmarca en los ejes estratégicos del Plan de movilidad urbana vigente. Las víctimas de los siniestros de tráfico son evitables, debemos tomar conciencia de ello para que todos los efectivos se involucren cada vez más en conseguir llegar a los objetivos de reducir un 50 % el número de lesionados grave y muertes, tal como indica la Estrategia de seguridad vial 2030, con el horizonte de cero víctimas mortales en el año 2050.
Según el último balance de siniestralidad, en el 2023 la implicación de los VMP en los siniestros viales se redujo un 10,8 % respecto al 2022. A pesar de ello, el número de heridos graves de los colectivos de conductores y pasajeros de vehículos de dos ruedas con motor, ciclistas, VMP y peatones suponen el 92 % del total de heridos graves.