Hasta mediados de septiembre la Guardia Urbana mantendrá activada la operación verano, un dispositivo específico que tiene el objetivo general de asegurar los niveles de movilidad, convivencia, civismo y seguridad en la ciudad durante los meses en qué se hace un uso más intensivo del espacio público a causa de la llegada del buen tiempo. Este dispositivo supone una intensificación de las actuaciones que realiza a lo largo del año la Guardia Urbana, que trabaja de forma coordinada y conjunta con los Mossos d’Esquadra y el resto de servicios municipales.
Los ejes principales de la operación son:
- Incremento del control del espacio público con el objetivo de prevenir hechos delictivos, comportamientos que perturben el descanso del vecindario y la degradación del espacio público. La reducción de la siniestralidad y la prevención de las violencias sexuales también forman parte de las actuaciones previstas.
- Prevención y trabajo para abordar la multirreincidencia.
- Coordinación con el servicio de mediación nocturna, que se pone en marcha en junio.
- Patrullaje preventivo para detectar situaciones de peligro forestal en el Parque de Collserola.
- Actuación del grupo específico de playas, grupo operativo integrado por 90 agentes.
También están previstas otras actuaciones relacionadas con el control de los vehículos de movilidad personal de uso comercial (ciclotaxis), los locales públicos y la actividad ruidosa en la calle.