Un año más, Montjuïc ha sido el escenario donde se ha celebrado el cambio de año en Barcelona. Con casi medio millar de drones, el espectáculo de la avenida de la Reina Maria Cristina ha sido un canto a la vida y al valor de los recursos marinos.
El espectáculo trata sobre el deseo de Año Nuevo, un sentimiento que se expresa en forma de esperanza, de futuro, de querer vivir mejor. Pirotecnia, luz y música simbolizan el imaginario de la ciudad y los deseos de las personas que la habitan, todo a partir de imágenes tan icónicas como la loseta barcelonesa, el perfil de Barcelona, la trama de L’Eixample o el modernismo, pero también con referencias a grandes momentos que nos traerá el 2024, como el Año Tàpies o la Copa América. El espectáculo es, de hecho, un homenaje a Barcelona y su relación con el mar, en un año en el que tanto la capital catalana como el mar tendrán protagonismo por todo el planeta.
El espectáculo fue a cargo de Groupe F, dirigido por Christophe Berthonneau, un experto en pirotecnia que, desde que trabaja con esta compañía, la mezcla en sus espectáculos tanto con la danza como con las artes de calle o los efectos especiales.
La celebración
La fiesta empezó con un show antes de la medianoche, durante el cual se comenzó a vivir la fiesta de la noche de Fin de Año con ambientación musical y lumínica en toda la avenida de la Reina Maria Cristina. Una inmensa bola de luz a 75 metros de altura presidió la celebración. Así, a partir de las 21.00 horas, la música empezó a preparar el ambiente y, a partir de las 23.00 horas, se activó la bola de luz.
A partir de las 23.00 horas y hasta las 0.15 horas aproximadamente, con una escenografía monumental, se pudo ver un montaje con música, fuegos artificiales y hasta 470 drones iluminados que llenaron el cielo de Montjuïc a 250 metros de altura.
A medianoche, los drones dibujaron en el cielo la forma de las uvas, con los doce granos que se tienen que comer en cada campanada. Después de los cuartos, doce golpes pirotécnicos secos y de gran efecto marcaron las doce campanadas que dieron paso al Año Nuevo. Y ya entrando en el año 2024, la tecnología, la luz y el fuego dieron vida al show Desig Barcelona, una fiesta ciudadana de pirotecnia, luz y música.
Este año, a causa de la situación de sequía, las Fuentes de Montjuïc no se han podido sumar a la fiesta.