Las compañías de luz, agua y gas tienen prohibido cortar el suministro a los hogares vulnerables, tal como estipula la Ley 24/2015. Al mismo tiempo, también obliga a estas empresas a mantener el servicio en todo momento mientras se mantenga una situación de dificultad económica.
Hay que recordar que el modelo energético estatal, las dificultades económicas y laborales para hacer frente a las facturas, los problemas derivados de un mal aislamiento o las situaciones de dependencia energética se mantienen durante el año y también sus efectos en la salud de las personas. Por eso, en la OMIC recordamos que hay que defender los derechos energéticos tanto en invierno como en verano.
Si no te puedes permitir mantener una temperatura adecuada en casa o usar el agua corriente, contacta con uno de los puntos de asesoramiento energético. Se trata de un servicio del Ayuntamiento de Barcelona que ofrece la información, atención e intervención necesarias para que las personas puedan ejercer sus derechos energéticos y las compañías no les nieguen el acceso a los suministros básicos. Puedes encontrar toda la información aquí.