Mercats de Barcelona

La estación de la primavera nos deja un paisaje lleno de colores. Si tenemos la suerte de disfrutar de una primavera con buenas lluvias, llegamos al verano con un entorno natural lleno de vida y colores. Pero, como es bien sabido, con la llegada del calor, aquellas flores que decoraban el paisaje primaveral pueden resentirse, y es entonces cuando hay que buscar esas variedades de la temporada de verano.

Tal como dice el refrán, `De flores en verano se encuentran mil´, y para conseguir un espacio exterior lleno de vida durante esta estación, es esencial elegir plantas y flores que sean resistentes al sol intenso y a los días calurosos.

Entre las opciones más recomendables se encuentran los girasoles y la lavanda, que no solo son icónicos de esta estación, sino que también crecen con la exposición directa al sol. Otro ejemplo son las begonias, las petunias y los geranios, conocidas por su capacidad de florecer en condiciones diversas, adaptándose tanto a la exposición directa al sol como a la sombra parcial.

Para mantener las flores de verano en buen estado, es crucial regarlas adecuadamente, preferiblemente a primera hora de la mañana o al atardecer para evitar la evaporación rápida del agua. Además, una poda regular para eliminar las flores marchitas y las hojas secas ayudará a mantener las plantas en buen estado y favorecer una nueva floración.

Y si queréis dar un toque de color al interior de vuestro hogar, tenéis muchas opciones para elegir. Los hibiscos, por ejemplo, son perfectos para decorar espacios interiores con sus grandes flores coloridas que florecen desde principios de primavera hasta finales de verano, y algunas variedades incluso llegan al otoño. Los espatifilos también son otra opción ideal para interiores, ya que también purifica el aire y prospera en condiciones de poca luz.

Regar las plantas de interior puede parecer sencillo, pero es un arte que requiere un poco de conocimiento y atención. Cada planta tiene sus propias necesidades de agua, así que es importante familiarizarse con los requisitos específicos de cada especie.

Generalmente, un buen método es comprobar la humedad del suelo con los dedos: si los primeros centímetros están secos, es momento de regar. El exceso de agua puede provocar problemas, como por ejemplo que se pudran las raíces. Aseguraos de que las plantas tengan macetas con agujeros de drenaje o añadid una capa de grava para mejorar el drenaje.

Y si sois más de ramos con flores naturales, Carolina de Flors Carolina, situada frente al Mercat de la Boquería, nos recomienda cuatro variedades de verano que resisten mejor el calor: los nardos, los agapantos, los girasoles y el lisianthus.

Para garantizar la mejor conservación de estas flores, Carolina aconseja cortar ligeramente los tallos al llegar a casa para facilitar una mejor absorción de agua. Además, es recomendable cambiar el agua del jarrón cada dos días y mantener las flores alejadas de la luz directa del sol para preservarlas en las mejores condiciones posibles.