Mercats de Barcelona

El melón y la sandía son dos de las frutas de verano por excelencia. Ambas cumplen uno de los objetivos principales que tenemos en estos días calurosos: refrescarnos. Y es que la composición de ambas frutas, mayoritariamente agua, sumada a la dulzura que aportan, las convierte en el postre ideal para redondear una buena comida veraniega. Además, el verano es el mejor momento para consumir tanto melón como sandía, ya que es su temporada.

En este caso, ambas frutas contienen pocas calorías y numerosas vitaminas y minerales favorables para nuestro cuerpo, así que incentivar su consumo es muy positivo. Para hacerlo, sin embargo, primero debemos asegurarnos de que las piezas que compremos estén en su estado óptimo. Por eso, elegirlas bien en la frutería o en el supermercado es muy importante. Hoy, dos vendedoras de los mercados de Barcelona nos explicarán qué es lo más importante a la hora de comprar melón o sandía.

“Es muy sencillo”, asegura Cristina Martorell, del puesto ‘Bo i Fresc’ del Mercado de Santa Caterina. Para ella, una de las claves para garantizar que la fruta que compramos es buena es, primero, que el lugar donde se compra tenga unos buenos proveedores que traigan productos de calidad. Después, una vez la fruta ya está en el mostrador, Cristina explica que la confianza con el frutero o frutera es muy importante, y que pedir o dejarse aconsejar es una de las mejores alternativas a la hora de elegir las piezas.

Una opinión que comparte Núria Massó, de Fruits Micó, en el Mercado de la Boqueria, que asegura que, aunque son dos frutas que durante esta época tienen mucho éxito, “la clientela pide más sandía que melón”. Una vez ya tenemos las frutas en casa, Núria explica que hay que “guardarlas siempre en la nevera para que estén frescas”.

En el caso de la sandía, también os dejamos algunos trucos para orientaros mejor a la hora de escogerla: evitad sandías agrietadas o deformadas, lo mejor es elegir una sandía con la forma lo más redonda posible; igual que el melón, el peso de una buena sandía debe ser proporcional a su tamaño; antes de comprarla, dadle unos golpes con los nudillos de la mano. Si el sonido que hace es hueco y rotundo, significa que la fruta está en su punto de maduración.

Sea como sea, está claro que ambas frutas son opciones ideales y totalmente complementarias para el verano. Habrá quienes sean más de sandía y otros a quienes les guste más el melón, pero lo más importante es que las incluyáis en vuestra dieta. ¡Y si pueden ser de cualquier frutería de los mercados de Barcelona, todavía mejor! Allí os atenderán y aconsejarán de la mejor manera para que disfrutéis del sabor refrescante de estas frutas.