Helados caseros para un verano saludable
Con la llegada del buen tiempo, no hay nada mejor que un helado refrescante. Pero, ¿qué te parecería poder disfrutar de los helados de forma más saludable? Y es qué hacer helados en casa es más fácil de lo que piensas y, además, es una opción perfecta para mantener una alimentación equilibrada. Hoy te traemos algunas recetas sencillas y nutritivas. ¡Vamos allá!
Comencemos con una opción que seguro gustará a todos: el helado de yogur y fruta fresca. ¿Quién no disfruta de la fruta fresca en verano? Esta receta es tan fácil que te sorprenderá. Solo necesitas dos tazas de yogur natural, una taza de tu fruta preferida y, si te apetece, puedes añadirle un toque dulce con miel o algún edulcorante natural.
Para prepararlo, tritura la fruta en una batidora hasta que quede suave. Después, en un bol, mezcla el yogur con la fruta triturada hasta que esté bien combinado. Si lo deseas, añade un poco de miel o jarabe de agave para darle ese toque dulce. Vierte la mezcla en moldes de helado y congela durante al menos 4 horas. Cuando estén listos, solo tienes que sacarlos del congelador unos minutos antes de servir para facilitar el desmolde.
Si prefieres una opción con un toque más exótico, prueba el helado de coco y plátano. Esta combinación es un éxito asegurado. Solo necesitas un brick de leche de coco y dos plátanos maduros.
Para hacerlo, tritura los plátanos y la leche de coco en una batidora hasta que la mezcla sea suave. Si lo deseas, puedes añadir un toque de extracto de vainilla para potenciar el sabor. Vierte la mezcla en moldes de helado y congela durante al menos 4 horas.
Para los más atrevidos, tenemos una combinación sorprendente: helado de chocolate con aguacate. Sí, has leído bien: ¡aguacate y chocolate! Para hacer este helado necesitas dos aguacates maduros, media taza de cacao en polvo sin azúcar añadido y un poco de miel o jarabe de agave si quieres endulzarlo.
Para elaborarlo, pela y quita el hueso de los aguacates, y luego tritúralos con el cacao en polvo en una batidora hasta que quede una mezcla suave y cremosa. Añade miel o jarabe de agave al gusto, si es necesario. Vierte la mezcla en moldes de helado y congela durante 4-6 horas.
¿A qué esperas? ¡Pasa un rato divertido en la cocina preparando tus propios helados! Además, puedes experimentar con diferentes combinaciones de sabores e ingredientes, añadiendo frutos secos, semillas o incluso superalimentos como la chía para darle un toque extra a tus helados. ¡Buen provecho y feliz verano!