Se instalan dos contenedores decorados con los personajes de la leyenda de Sant Jordi en colaboración con Ecovidrio
La entidad montará un estand informativo en el que educadores ambientales aconsejarán a los ciudadanos sobre cómo reciclar sus envases de vidrio.
El Ayuntamiento de Barcelona, en colaboración con Ecovidrio, entidad sin ánimo de lucro encargada de la gestión del reciclaje de residuos de envases de vidrio en España, el 23 de abril, con motivo del Día de San Jordi, instalará en la Biblioteca Jaume Fuster dos contenedores verdes decorados con los personajes de la leyenda. Además, Ecovidrio sorteará miniglús —unos pequeños contenedores de vidrio diseñados para el reciclaje doméstico— decorados con los personajes de Sant Jordi en el estand de la entidad.
El sorteo se llevará a cabo mediante un rasca y gana virtual entre los visitantes del estand informativo, en el que educadores ambientales informarán a los ciudadanos sobre cómo separar correctamente sus envases de vidrio y los beneficios medioambientales del reciclaje de estos. El estand estará abierto al público de 10.00 a 20.00 horas durante todo el Día de Sant Jordi.
Datos de reciclaje de vidrio en Barcelona
Según los últimos datos disponibles, correspondientes al 2023, los ciudadanos de Barcelona reciclaron un total de 34.675.060 kilogramos de envases de vidrio. Eso supone que cada ciudadano recicló una media aproximada de 24 kilogramos de vidrio durante el año.
Con respecto a la tasa de contenedores, Barcelona se sitúa en una media de 400 habitantes por contenedor, y cuenta actualmente con un total de más de 3.800 contenedores para los residuos de vidrio instalados en toda la ciudad.
Beneficios ambientales del reciclaje de vidrio
El vidrio que se deposita en los contenedores se recicla al 100 % y se utiliza para la fabricación de nuevos envases, de forma indefinida y sin perder las propiedades originales. Reciclando vidrio evitamos el crecimiento de los vertederos.
Reciclar vidrio es una acción clave en la lucha contra el cambio climático. Al utilizar calcín (vidrio reciclado) en la fabricación de nuevos envases, se evita la extracción de materias primas de la naturaleza y se evita la erosión de los suelos y la deforestación de nuestro entorno. Además, se minimiza la emisión de CO2 en el proceso de fabricación y se ahorra energía.